lunes, 19 de mayo de 2008

| Frankenstein es el culpable |

Un día el viento en uno de sus tantos actos de locura me envolvió, me arrastro y me llevo hasta afuera de t casa, no le importo si llovía o relampagueaba y ahí me encontraba yo empapada y sin habla. Sólo quería que llegara Frankenstein y que con su pie aplastara tu casa y que con su rugido me abrazaras, pero ese día no estaba drogada y Frankenstein nunca llegaba, no llego, no llegara... Tú me mirabas con cara extrañada pero no era para menos, quería salir corriendo y el viento no me dejaba y Frankenstein no llegaba, no llego, no llegara.Me sentía ruborizada pero no a ese limite cuando me dijiste que pasara y me enredaras en tu vía Láctea. Oh! que lindo lugar, ni tus amigos cibermarcianos con cabellos de siete colores me harán bajar de acá, porque yo estoy en condición de subir y todo por la culpa de Frankenstein que no llego, no llega y espero que no llegue.